HUGO CHÁVEZ, EL TRIBUNO QUE CAMBIÓ A VENEZUELA
Sus detractores le lanzaron sus críticas
más acervas durante los catorce años de su mandato, pero en modo alguno
pudieron ensombrecer la enorme figura carismática del hombre que, con una
visión certera de los problemas que pesaban sobre sus humildes compatriotas,
puso en marcha lo que él mismo calificaba de “socialismo del XXI siglo”, fiel a
sus pronunciamientos anticapitalistas y a su voluntad por abrir en su país una
nueva era de paz y de justicia.
Dentro y fuera de Venezuela, la derecha
más retrógrada lo combatió construyendo un tejido de calumnias y conspirando
una y otra vez para derrotarlo con las peores artes. Pero Chávez atravesó con
firme pie todas esas vicisitudes, sabedor de que la inmensa mayoría de
venezolano estaba a su lado. Accedió al poder democráticamente y hasta sus
peores enemigos tuvieron que conceder las derrotas sufridas por ellos en las
urnas.
La enorme riqueza petrolera del país no
fue empleada por Chávez en beneficio suyo, y esto tiene también que ser
admitido por todos, sino que le sirvió de palanca para echar adelante una
política social destinada a eliminar progresivamente la pobreza.
¡Qué duda cabe que la bandera bolivariana
enarbolada por Chávez será empuñada ahora por todos los líderes
latinoamericanos que hicieron suyas sus ideas de paz, amor a Cristo y
desarrollo para los que más tiene necesidad de ello! Su enfrentamiento con los
Estados Unidos se sustentaba en la sagrada obligación de no transigir ante la
presión de los seguidores de la vieja política de Monroe: “América para los
(norte) americanos”. Gracias a Chávez se crearon toda una serie de
instituciones destinadas a defender la independencia de Latinoamérica; crear organismos
de cooperación regional y aunar esfuerzos para llevar adelante el subcontinente
en los más variados capítulos.
Es de desear que su sucesor designado,
Nicolás Maduro, prosiga fielmente con la línea trazada por el fallecido
tribuno. Probablemente no será fácil, dada la magnitud de la figura de Chávez
al que la historia de Latinoamérica le tiene reservado uno de sus más memorables
capítulos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario